El cristal y la cerámica tienen elementos comunes en cuanto vitrificación y translucidez. Además, casan a la perfección y la temperatura utilizada en cerámica, sirve para vitrificar y fundir el cristal. De esta forma, podemos combinar entre sí forma, esmalte y cristal con resultados sorprendentes. ¿Quieres saber cómo?
La gama de productos Duncan Chrystal Chips está formada por cristales secos de distintos colores que se pueden añadir a esmaltes, permitiéndonos jugar con sus efectos y crear piezas únicas. Aportan efectos parecidos a los esmaltes comerciales de Mayco y Duncan, pero con la ventaja de que podemos combinar los colores que más nos gusten.
Se pueden usar en baja y alta temperatura, pudiendo encajar a la perfección con cualquier estilo de trabajo.
En plano, el resultado será más estable y definido, apareciendo lunares más o menos controlados, pero aplicados en piezas verticales descolgarán y fundirán con el esmalte sobre el que los hemos aplicado y crearán efectos únicos.
¿Qué necesitas para decorar tu pieza con cristales?
Material:
- Piezas bizcochadas para decorar.
- Esmaltes de la marca Mayco Stroke&Coat
- Cristales Duncan Chrystal Chips
- Pinceles o paletinas
PRIMER PASO
Hemos elaborado previamente unas piezas con arcilla blanca de baja temperatura que hemos bizcochado en el horno. También puedes adquirir piezas de bizcocho ya elaboradas.
SEGUNDO PASO
Esmaltamos nuestras piezas bizcochadas con los colores que más nos gusten de la gama Stoke&Coat de Mayco. Nosotros hemos escogidos unos coladores, que decoraremos con azul claro en el interior y blanco en el exterior.
TERCER PASO
Dejamos secar la pieza. A continuación, aplicamos esmalte brillo de la misma gama, en el interior de la pieza, que es donde queremos que se adhieran los cristales. Esto lo hacemos simplemente para que se peguen, sin ningún otro objetivo decorativo.
CUARTO PASO
Echamos nuestros cristales de la marca Duncan en la pieza, antes de que el esmalte transparente se haya secado.
Aquí podemos jugar con los colores, creando efectos y combinando tantos cristales como queramos. Todo dependerá del resultado decorativo que queramos obtener.
QUINTO PASO
Cocemos nuestra pieza a 1050 grados, ¡y listo!
El resultado es precioso, y las piezas únicas. ¿Te atreves a probar?
