En ocasiones el esmalte aplicado sobre una pieza cobra vida propia y escurre más de lo esperado cubriendo zonas no deseadas, como la base, y que pueden desestabilizar una pieza. Para ello tenemos una solución: la piedra de cuarzo.
La piedra de cuarzo quita esmalte modelo STIF es un buen aliado en aquellos casos en los que nuestro esmalte escurra por zonas de la pieza no adecuadas. Puede ser que nos hayamos equivocado en su aplicación, pero lo más probable es que haya escurrido por lugares que no nos interesan, como puede ser la base de una pieza. También es ideal para eliminar la alúmina que queda pegada en la pieza, procedente de la placa.
Si el esmalte llega a estas zonas, la pieza de cerámica pierde su estabilidad, por lo que es mejor eliminarlo. Cualquier lija no podrá quitar una capa de esmalte gruesa.
¿Cómo utilizamos la piedra de cuarzo?
Frotamos la zona afectada con la piedra, de forma delicada. Con un poco de paciencia iremos quitando el esmalte y descubriendo la pasta original de nuestra cerámica. La piedra de cuarzo actúa de forma abrasiva puliendo la zona sobre la que la aplicamos.
Para conseguir un acabado perfecto, con una lija más suave acabamos de eliminar los pequeños restos de alúmina que hayan quedado. Son más fáciles de eliminar, y no necesitamos algo tan potente como la piedra de cuarzo.
Limpiamos la zona que hemos lijado y listo, la pieza como nueva.
Consigue la piedra de cuarzo aquí: