Medusas, corales, flamencos, labios que susurran y ojos que observan. Son algunas de las muchas ilustraciones que pululan por los platos de la artista Nuria Blanco. Dibujos que ya se han convertido en iconos dentro del mundo de las vajillas pintadas a mano.
Los platos se convierten en lienzo, en piezas de un puzzle que llenan de color y de arte las casas particulares, las paredes y las mesas de los restaurantes.
Nuria Blanco busca llegar a todo tipo de público con su arte. Democratizar la obra artística y convertirla en una obra de culto al mismo tiempo que un objeto utilitario. Así son sus vajilla, asequibles, personalizadas y únicas, como una pieza de arte.
«No todo el mundo se compra un cuadro, pero sí una vajilla», nos cuenta Nuria, que desde su taller de Madrid diseña sus vajillas, pintadas siempre a mano.
Estudié Bellas Artes y aunque me he ganado la vida en diferentes ámbitos, siempre tuve muy presente mi parte creativa, tocando todos los palos: fotografía, dibujo y pintura.
Su comienzo con el material cerámico vino a raíz de un proyecto que realizó en el taller de Concha Tinajas. A partir de entonces, se quedó «enganchada» con la técnica.
«Tras probar todo tipo de materiales para distintas exposiciones que hice, comencé a dibujar en vajillas para regalar a amigos. Gustaron mucho, tuve algunos pedidos personalizados y me lancé a participar en tiendas pop up y mercados; cuando la cosa empezó a funcionar, me dediqué de pleno a ello», nos cuenta Nuria.
La cerámica es un mundo muy amplio, y en tu caso Nuria, la especialización es clara: las vajillas. ¿Cómo realizas tus piezas?
Dibujo sobre platos bizcochados bajo cubierta. Utilizo sobre todo loza blanca realizada en Toledo con moldes de prensa y otras por encargo realizadas por un alfarero.
Las dibujo con óxidos silicatados, las esmalto en brillo transparente y las cuezo a 1030º.
Es la fórmula que permite que mis dibujos se realicen con el mayor detalle y el realismo que me caracteriza. Además, hace que el plato tenga todas las características necesarias para su uso alimenticio y le da una mayor calidad y durabilidad.
Háblanos de tu proyecto más reciente, la Colección Terra.
He comenzado a usar terracota en mi última colección de vasijas que he realizado junto con las manos del alfarero Julián Aria de las Heras, de Puente del Arzobispo. Unas piezas torneadas y pintadas a mano y esmaltadas solo en su interior. Piezas más decorativas, pero con el mismo estilo que me define.
¿Por qué escogiste el formato vajilla para desarrollar tu obra pictórica?
Me gustaba que el lienzo fueran piezas tridimensionales, era un nuevo reto. Es un material con el que puedo jugar con sus formas y su tratamiento.
Hay una parte en el que las manos tienen un papel muy importante y me encanta trabajar con las manos.
También me gusta mucho la cocina y trasladando mis dibujos a los platos puedo unir dos de mis dos pasiones. Poder presentar mis recetas sobre mi obra es fascinante.
Conocemos el mural que hay en el restaurante Sushita Café de Alberto Aguilera, en Madrid. Un precioso calamar gigante. Háblanos de tu obra mural. ¿Qué dificultades encuentras a la hora de abordar estos trabajos de gran formato?
Con los murales es con lo que más disfruto. Unir los platos y jugar con las composiciones me resulta muy divertido. He hecho murales para restaurantes en Madrid, al que más cariño tengo es el calamar de Sushita Café, fue el primero que hice tan grande. Mide más de tres metros y me costó mucho trabajo, sobre todo esmaltarlo y cocerlo ya que los platos son de 60 cm.
Me encanta también ir a Casa Macareno y estar rodeada de mis murales, además de sentirme como en casa porque son amigos míos. Lo último que he hecho ha sido para las marisquerías Norte y Sur y un mural para México que mide más de 4 metros de ancho.
Lo más complicado es componer el dibujo en un puzle; al ser formas redondas hay que darle muchas vueltas para que encajen bien , soy muy maniática con la simetría. También se complica el montaje, intento siempre montarlo yo, pero en el extranjero es difícil. Ojalá viajara tanto como mis vajillas.
¿Cuáles son tus fuentes de inspiración?
Uno de mis referentes sin duda siempre es Picasso. Me encanta cómo era capaz de trasladar su estilo a todas las disciplinas. La libertad con la que dibujaba casi intuitivamente y sus piezas de cerámica son maravillosas.
Louise Bourgeois me ha inspirado en todo mi trabajo. Me inspiran muchas cosas, desde la naturaleza, las ilustraciones antiguas hasta la propia comida que va a ir encima de los platos.
La situación actual ha dado un giro de 180 grados debido a la pandemia. ¿Cómo crees que puede afectar esto a la venta y distribución de obras de arte y artesanía?
Creo que a pesar de la crisis que se avecina, también vamos a valorar mucho más el trabajo artesanal y hecho con cariño. He sentido mucho el apoyo a las pequeñas empresas y el comercio de proximidad.
Creo que después de pasar tanto tiempo en casa también vamos a darle más importancia a las cosas que nos rodean y eso beneficia al arte y a la cerámica. Como ves, quiero ser optimista.
¿Qué estás haciendo tú para re convertir tu negocio?
Creo que el futuro está muy vinculado con las redes sociales y la venta online. Yo ya he comenzado a invertir más tiempo en mi web y en nuevas formas de comprar así como en realizar cursos online.
¿Qué recomendación darías a alguien que quiera dedicarse al mundo de la cerámica, de manera profesional?
Que al crear sea honesto consigo mismo y no pretenda copiar ni imitar a nadie. Se valora que tu trabajo sea original y con tu alma. También la calidad de los materiales. Es mejor dedicarle tiempo y ser paciente que querer vender mucho. La cerámica se lleva mal con las prisas y las súper producciones.
Dinos qué herramienta no puede faltar en tu estudio, para realizar tus piezas.
Lo principal son mis pinceles. Con ellos todo empieza y algunos son una prolongación de mi mano.
Cerámica, arte y artesanía hoy, ¿qué opinas del mercado español vs mercado extranjero?
En el extranjero creo que valoran todo lo que tiene que ver con el trabajo hecho a mano. Con invertir en piezas que duren toda la vida y que se hereden familiarmente. Se les da más importancia a los objetos. Nosotros somos más de usar y tirar y nos cuesta más gastarnos el dinero. Aunque creo que esto está cambiando. También existen más facilidades y más ayudas para poder emprender.
Sabemos que acabas de lanzar una sección en tu página web donde los clientes van a poder crear sus propias vajillas con tus dibujos. ¡Y tenemos unas ganas tremendas de probarlo!
Sí, actualmente he sacado un apartado nuevo en mi web donde tú mismo puedes crear una vajilla con mis dibujos. Una oportunidad para que el cliente pueda participar en el proceso de creación realizando una vajilla única y exclusiva y así a mí me permite trabajar sobre pedido y no tener tanto stock. Es muy divertido, os invito a probar en www.vajillasbynuriablanco.com/pages/personalizar
Por otro lado, me gustaría poder hacer una presentación de la colección Terra físicamente para otoño, pero con la situación que estamos viviendo creo que se tendrá que retrasar todo.
Ojalá sea muy pronto. De momento seguiremos dando guerra virtualmente.
Salta a la vista por sus palabras y múltiples proyectos que Nuria Blanco es una mente creativa, tanto en la cerámica como en el emprendimiento y en su empresa artística. Es un claro ejemplo de persistencia unida al talento y a las buenas ideas.
Nos parece una fórmula impecable, y seguiremos de cerca como hasta ahora, su trabajo.
¡Gracias!
Conoce más sobre Nuria Blanco en:
https://vajillasbynuriablanco.com/
