Marta Armada es artista y curiosa por naturaleza. La búsqueda y la experimentación son el leitmotiv de su trabajo. Y la porcelana es su material fetiche. Un barro que hay que conocer y mimar. La porcelana «respira», tiene  memoria, baila y se transforma. Así es el trabajo y la obra contado por su autora, Marta Armada.

Marta Armada trabaja en su taller de Vigo donde también tiene su hogar,  aunque moverse por el mundo es parte de su obra. Inspirada por la vida  y los viajes, Marta Armada crea, siempre atenta a lo que le rodea, siempre observando. Dando importancia a los detalles que llenan la vida cotidiana.

El torno y el diseño de joyas son su especialidad. Sin embargo su creatividad no tiene límites. «En definitiva se trata de ajustar la mirada y ser abierto a los descubrimientos, arriesgar». explica Marta. Para ella parte del proceso creativo consiste en experimentar y en arriesgar.

Hola Marta, gracias por concedernos esta entrevista. Teníamos mucha ganas de conocer un poco más de cerca tu trabajo. Cuéntanos, ¿cómo llegaste al mundo de la cerámica?

Empecé muy joven, de la mano de Fernando Paz y luego Miguel Vázquez, en Vigo, mis grandes maestros que me regalaron una base sólida. Tengo frases grabadas en mi memoria, consejos importantes que sigo a día de hoy.

También pasé por la Escuela de Cerámica de la Moncloa de Madrid, de la que tengo grandes y buenos recuerdos. Fueron unos años de dar rienda suelta a la imaginación, tuve allí buenos maestros también que me daban libertad para expresarme. Mi paso por la Escuela de la Moncloa fue crucial, fue apasionante y divertido, empezar a mirar de otra manera.

Siempre tuve claro que me quería dedicar a la cerámica y aunque en mis comienzos trabajé en otras disciplinas, la arcilla, en especial la porcelana, me ha acompañado hasta hoy. Me gusta mucho también trabajar el metal, tiene otras pautas, cada material tiene un lenguaje propio y es apasionante descubrirlo, experimentar, no hay fin.

¿Qué técnicas te gustan más? Háblanos de tu obra en joyería.

Todos mis trabajos de los últimos cuatro años parten del torno. Es una herramienta muy importante para mí, por sus múltiples posibilidades, ahí se mezcla lo tradicional y lo contemporáneo. Es un oficio que requiere muchas horas. La primera vez que me subí a un torno era muy joven y supe enseguida que nunca me cansaría, me pareció una herramienta muy versátil y con infinitas posibilidades.

Mis últimos trabajos de joyería y escultura parten del torno. En definitiva se trata de ajustar la mirada y ser abierto a los descubrimientos, arriesgar.

A la joyería llegué de manera casual, o no, quizás es fruto de la evolución. Me siento muy cómoda en el pequeño formato, es más íntimo. Me gusta trabajar con piezas que caben en la palma de la mano, para así poder sostenerlas, verlas de cerca.

Lo que más me gusta de trabajar con porcelana es la experimentación, es un material caprichoso y difícil de trabajar, en realidad todos los procesos me interesan, el torneado, el esmalte, el horno. Es un trabajo muy lento y minucioso.

Últimamente mi trabajo oscila entre la escultura, el diseño y la joyería. Hay piezas que comienzan siendo pequeñas esculturas y finalmente terminan como joyas y al revés. Trabajo de manera intuitiva, centrándome en la forma, ella es la que me va dando las claves de lo que puede llegar a ser.

Referentes, ¿en quién o qué te inspiras?

Mi trabajo es una consecución de mi vida, por lo tanto va acorde con mi ritmo de vida, los viajes, la vida diaria, todo lo que me rodea.

Viajar es fundamental para mí. Los desafíos creativos son la fuerza motriz de mi vida, y mis experiencias artísticas, la más reciente en Taiwán, me han enseñado lo  importante que es trabajar con otros para mi propio trabajo. La colaboración artística resalta y difumina las diferencias y los límites culturales desatando la creatividad. Esto ha ocurrido durante cada una de las residencias artísticas en las que tuve la oportunidad de trabajar.

¿Cuál es tu colección o pieza favorita?

La última. Cuando acabo una serie, después de múltiples experimentos, pruebas, cocciones, cuando doy una serie por terminada me interesa ya la siguiente.

No tengo una pieza favorita, cuando estoy trabajando en una pieza, esa es la favorita y en ella pongo todo mi esfuerzo y emoción.

Cuando la termino me interesa lo siguiente. Cada serie me va dando unas claves, unas guías para saber hacia donde dirigirme para continuar.

La porcelana es un material importante para ti

Me gusta la porcelana, por su complejidad, su naturaleza. Es un material caprichoso y como todo material tiene su lenguaje, la emoción está en saber descifrar los códigos

Es un material al que tienes que tratar con delicadeza y determinación y eso solo se consigue con la experiencia. Muchas veces el resultado es fascinante. Me gusta llevar el material al límite de sus posibilidades, traspasar ese límite, equivocarme. De los errores y del azar surgen infinitas posibilidades.

¿Dónde podemos encontrar tu obra?

Normalmente vendo a través de mi tienda online aunque en éstos momentos la tengo cerrada preparando nuevas series.

Aparte tengo obra en galerías en Taiwán, Portugal, Francia, Madrid y Santiago de Compostela.

Algo que no puede faltar en tu taller de cerámica

De lo que he aprendido en mis viajes es que se puede trabajar con muy poco y eso es lo que intento transmitir cuando imparto un taller de joyería. En mi taller tengo todo tipo de herramientas que sin duda me facilitan el trabajo pero cuando viajo prefiero dejar mis herramientas en casa para poder abrirme a nuevas posibilidades. Me gusta trabajar con lo que encuentro allá donde voy, verme sin el soporte de mi taller y mis herramientas habituales. De esa manera es como surgen nuevas líneas creativas

Por otra parte el torno de alfarero sin duda es mi herramienta favorita. Todos mis trabajos de los últimos años parten del torno de alfarero, una herramienta fascinante y con infinitas posibilidades.

¿Proyectos de futuro a la vista?

Volver a Asia, viajar. Mi experiencia como Artista residente en Taiwán fue un antes y un después en mi trabajo. Encontré mucha generosidad, surgieron colaboraciones con artistas y me siento muy cercana a la estética y el carácter asiático.

Cerámica, arte y artesanía hoy, ¿Qué opinas del mercado español de la cerámica vs mercado internacional?

Creo que deberíamos ampliar nuestra mirada, ser curiosos. Siguen haciendo falta espacios donde mostrar el trabajo. La joyería contemporánea por otra parte sigue siendo una gran desconocida. En Taiwán y en China me ha ido muy bien pero en España es más complicado. Nos hace falta tener una mente más abierta hacia lo contemporáneo. Arte, artesanía… sin duda conocer el oficio te ayuda a la hora de desarrollar un proyecto artístico.

Percibo a veces la falta de una base sólida, no todo vale, el concepto tiene que ir acompañado de algo más, conocer el material con el que trabajas, como respira, te ayuda a contar mejor una historia y a darle forma.

¿Qué consejo darías a alguien que quiera dedicarse profesionalmente a la cerámica?

El truco es trabajar, mucho, con pasión y honestidad. Investigar, experimentar, viajar, ver, compartir y sobre todo trabajar duro, constancia, paciencia y buen hacer.

Gracias Marta por tu trabajo honesto y por la profundidad de tu obra y de tus palabras. Hacen falta sin duda reflexiones y mucha experimentación en torno al arte y al material cerámico como vehículo para expresar. En el trabajo de Marta observamos estos detalles, que marcan la diferencia y sitúan nuestra cerámica en un nivel superior.

Más sobre Marta Armada:

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